¿Sabías que podes entrenar tus reflejos? ¡hace todo lo posible para mejorar!
Los reflejos constituyen una reacción muscular a los estímulos externos ocasionada por impulsos nerviosos. Por ejemplo, cuando observas que una pelota de béisbol se acerca volando a tu cabeza, tu cerebro le envía una señal a tu mano para que bloquee la pelota antes de que esta te golpee. Los buenos reflejos contribuyen al desempeño en los deportes, el ejercicio y las actividades físicas cotidianas, como cruzar la calle o conducir un auto
Mejora tu visión periférica. Para tener un tiempo de reacción rápido, debes estar profundamente consciente de lo que esté por venir. Puedes prestar una mayor atención a tu visión periférica durante tus actividades cotidianas para así fortalecer tu capacidad de percepción de los obstáculos y los objetos voladores.
- Mira por una ventana con una buena vista y enfócate en un objeto lejano. No dejes de mirarlo y, a la vez, adquiere lentamente una mayor consciencia de los objetos que lo rodeen a cada lado. Practica este ejercicio una vez al día y, cada vez, amplía un poco más tu campo visual. Con el tiempo, adoptarás el hábito de prestar atención a una mayor cantidad de objetos en tu visión periférica.
- Busca en línea videos de técnicas de artes marciales que se usan para mejorar la visión periférica.
Practica atrapar una pelota de goma que rebote o una «pelota de reacción». Estas últimas son pelotas de goma de seis lados que rebotan en ángulos impredecibles y que puedes conseguir en la mayoría de las tiendas de artículos deportivos. Lanza una de estas pelotas (o una pelota simple que rebote de esas que se consiguen en las máquinas expendedoras) contra una pared exterior.
Come alimentos nutritivos. Para tener reflejos rápidos, es imperativo que tu cuerpo y tu cerebro estén en la mejor forma posible. Los alimentos con un alto contenido de azúcares refinados y grasas trans pueden hacer que te sientas perezoso, por lo que debes consumir una cantidad suficiente de proteínas, carbohidratos complejos y grasas saludables.
- Los alimentos no procesados ni refinados, como las nueces, el pescado, las bayas, los vegetales de hoja y el ajo, incrementan la función cognitiva.[5]
- Asimismo, debes beber suficiente agua. Esto se debe a que la deshidratación puede ocasionar aletargamiento y disminuir el tiempo de reacción.
Duerme bien. Los Institutos Nacionales de la Salud de los EE.UU. (NIH, por sus siglas en inglés) afirman que el sueño ayuda a incrementar la velocidad de los reflejos y ocasiona un mayor nivel de rendimiento que el que obtendrías de otra forma.[6] Cuando tienes sueño, tu cuerpo y tu cerebro funcionan más lentamente, lo cual afecta tu tiempo de reacción. Cuando estás descansado habiendo dormido entre 7 y 9 horas, tus reflejos alcanzan su mayor rapidez.
- Una buena noche de sueño abarca entre cuatro o cinco ciclos de sueño. Cada uno de ellos está conformado por un periodo de sueño profundo y de sueño de movimientos oculares rápidos (MOR). En total, esto suma entre 7 y 9 horas en una noche.
- En caso de que no hayas podido dormir bien la noche anterior a una carrera o partido importante, puedes tomar una siesta varias horas antes para así poder estar más alerta al momento de desempeñarte.v